martes, 12 de marzo de 2013

Poemas Veraniegos

Cedinfa


Quisiera compartir con mi comunidad el intento de dialogar a través de un nuevo lenguaje: la poesía. Y así al atreverme, ustedes se darán permiso para caminar por nuevos senderos. Gracias por permitirlo.

MAÑANA DE VERANO EN JUAN DOLIO
                                                                                                           Por: Lourdes Henríquez Díaz

Caminar bajo el sol zigzagueante; cual culebra caprichosa
Nos lleva a descubrir:
La playa abandonada
Cascos de rotas botellas
Asustados lagartos que se arrastran presurosos
Alguna caprichosa flor morada de hierbas rastreras
Un solitario cangrejo, que un trío adolescente le hace foto
La tibieza de las Caribes aguas
El miedo de pisar erizos marinos en la negra vegetación que se vislumbra.
Un pez globo muerto y su blanca vejiga. Dos niños sorprendidos con el cadáver y su madre.
Una familia haitiana se acomoda bajo las sombras del palmero.
El compartir de las amigas y sus quejas al abandonar las tibiezas que nos acogen.

VACACIONES EN JUANDOLIO

Cuando cae la tarde al lado del mar Caribe
La brisa salina bienhechora nos envuelve
La amistad compartida
Las gaviotas revolotean presurosas
El juego saltarín de los niños
Anuncian agua, lluvia, frio…
El hambre toca la puerta
Nos acoge la noche
Y el calor del hogar de la pequeña cocina.
Leer, leer, hablar inglés, darnos masajes
Oír música alternativa, tomar algún trago ocasional
Descubrir las sorpresas arquitectónicas de nuestro albergue temporal.

De Padres a Hijos

CEDINFA


De Padres a Hijos
Por: Lourdes Henríquez Díaz
La educación es un largo viaje que comienza y termina en el hogar. Por lo que Padres y maestros haciendo equipo necesitamos aprender unos de otros.
 Los padres, aprenderíamos conductas de los hijos, habilidades y destrezas que solo se manifiestan en el contexto escolar. Y l@s maestr@s sabrían de las preferencias, rechazos, miedos, necesidades educativas especiales o fortalezas que adornan a los hijos.
La escuela y el hogar necesitan hablar un lenguaje común. Y es a nosotros los padres que nos corresponde acercarnos a la institución donde estudian nuestros hijos, y conocer de qué forma podemos contribuir en el logro de los objetivos educativos.
Si queremos que nuestros hijos lean, necesitamos ser modelos de conducta y que nos vean leer: el periódico, revistas, comic, novelas, cuentos, poesías, ensayos. Llevarlos a las ferias del libro, museos, conferencias, bibliotecas, teatro. Así el cerebro del y la niña, se siente cómodo, le es más fácil, prestar atención y concentrarse en las tareas académicas.
En el hogar diariamente cuando preguntamos al niño sobre la tarea, mandamos el mensaje de que nos importan, de que es valioso lo que hacen. Si tienen un horario de estudio, de no menos de dos horas diarias, pueden hacer sus deberes en un ambiente fresco, con mucha luz natural, y de ser posible estudiar todos los días a la misma hora, en el mismo lugar.
Es un gran regalo para los hijos e hijas que valoremos sus esfuerzos, y tanto papá como mamá, puedan acompañarlos en la realización de sus tareas, tomando turnos, creando así un ambiente de equipo, de colaboración, que une en los lazos afectivos y trasmite la sensación de nosotros.